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CENTROS CÍVICOS DE BOO Y TORRES QUEVEDO: PUNTOS DE ENCUENTRO DEL ASOCIACIONISMO LOCAL

Febrero 08 2018

Durante la presente legislatura se ha logrado dinamizar estos centros con múltiples actividades

La Concejala de Cultura, Educación y Juventud del Ayuntamiento de Astillero, Mª Ángeles Eguiguren, ha informado que, a lo largo de la legislatura actual, una de las prioridades que ha marcado desde este área ha sido implementar y potenciar la actividad en los centros cívicos del municipio, en concreto el de Boo y el centro Torres Quevedo y hacer de ellos un punto de encuentro del asociacionismo local.

"Nuestro objetivo ha sido dinamizar y potenciar los centros cívicos aprovechando al máximo sus posibilidades, para dar cabida a todas las agrupaciones y colectivos que los necesiten para el desarrollo de sus actividades y posibilitar que las mismas tengan una continuidad en el tiempo y puedan realizarlas durante todo el año, incluso en época estival.”

Ambos centros son espacios donde multitud de asociaciones tienen su sede, de carácter permanente, y que también se utilizan para el desarrollo de diversas actividades lúdico y culturales, que son organizadas por las propias asociaciones, como yoga, taichi, danza, pilates o body training, manualidades o clases de punto, ganchillo y bolillo; además, en el caso del centro cívico Torres Quevedo, este espacio acoge, por un lado, la Escuela Municipal de Folclore, gestionada por La Barquía que imparte clases de pandereta, danza, rabel, tambor, pito montañés o dulzaina y gaita, entre otras, con el fin de mantener y difundir la tradición musical cántabra y, por otro, la escuela municipal de ajedrez, dirigida por el club ajedrez Astillero, que utiliza este edificio durante todo el año para entrenamientos y torneos. También se desarrollan en el Centro, por parte de agrupaciones musicales, los ensayos de la Charanga El Cancaneao, la Escolanía y la Coral Municipal Astillero-Guarnizo.

En lo que se refiere al centro cívico de Boo, que se inauguró en el 2015, en poco más de dos años, se ha convertido en un espacio social y cultural para los ciudadanos del entorno. Un lugar donde, a diario, acuden los vecinos para realizar actividades de ocio y que constituye un punto de encuentro fundamental para aquellos que buscan actividades alternativas. Este espacio constituye la sede y lugar común de varias asociaciones de la zona, como AV de Boo, Asociación de mayores y Asociación La Buena Amistad, pero también, al igual que el Torres Quevedo, es un espacio utilizado desde la Concejalía de Cultura para la organización de talleres de adultos, actividades infantiles, cuentacuentos, exposiciones, clases de refuerzo educativo y representaciones diversas.

"Estamos muy satisfechos porque, tanto el Centro Cívico de Boo como el Torres Quevedo en Astillero se han convertido en lugares de referencia para todos los vecinos y se están aprovechando al máximo todas sus capacidades, que son muchas, para mejorar el ocio y el tiempo libre de los ciudadanos", y añade que “Desde que el 1 de enero de 2016, entro en vigor la modificación de la ordenanza para el alquiler de espacios culturales, que supuso una disminución importante del precio para colectivos y asociaciones del municipio, la demanda de uso ha aumentado muy notablemente, porque el precio, que, actualmente, está fijado en 5 € media jornada, frente a 50 € en épocas anteriores, ya no supone un obstáculo para cualquier colectivo que quiera hacer uso de estos espacios. Antes los vecinos no solicitaban el alquiler por el elevado coste que suponía, pero ahora son muchas las demandas que tenemos para charlas, conferencias o simplemente reuniones de comunidad.” apunta la concejala.

Por último, destaca la importancia que se da desde su Concejalía al asociacionismo como elemento fundamental de la dinamización de la sociedad. "Intentamos, en la medida que se puede por razones de disponibilidad, dar facilidades a los vecinos que formen agrupaciones, que se relacionen, que creen actividades y que potencien sus capacidades y creemos que facilitando el acceso a lugares donde puedan reunirse contribuimos positivamente a ello, porque no queremos que la cuestión económica de alquilar un local sea un impedimento para constituir un colectivo, dado que todos son importantes y tienen algo que aportar", concluye la concejala de Cultura.

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