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Esta semana se procederá a la retirada de un laurel situado junto al parque de La Cantábrica por riesgo de caída

Noviembre 19 2018

Durante el reciente temporal de viento la rotura de varias partes del árbol dejó a vista la pudrición que afecta al cuello del laurel
 
Los técnicos de la empresa Urbaser han recomendado la retirada urgente de un ejemplar de Laurel real situado al borde de la Carretera Nacional y al lado del Parque de La Cantábrica por el alto riesgo de rotura y caída.  El examen del árbol ha confirmado la pudrición del cuello del árbol, que requiere su retirada “lo antes posible por el índice de caída y rotura que presenta”, dado además que se encuentra en una zona  donde “la afluencia de gente y el paso de viandantes es elevado”.
 
Durante una de las jornadas de fuertes vientos que recientemente azotaron Astillero, se produjo la rotura de varias partes del árbol, aunque, afortunadamente y a pesar de su gran tamaño, no causaron daños personales ni materiales. El informe técnico posterior señala que “este árbol tiene varios pies unidos en el sistema radicular”, del que durante las rachas de viento cayeron dos de esos pies, “dejando al descubierto una pudrición que afecta al cuello del árbol” y que “afecta gravemente a su estabilidad”.
 
La concejala de Medio Ambiente, Maica Melgar, ha señalado que “el informe es tajante y concluyente sobre las medidas a tomar sobre este laurel”, por eso, esta misma semana se procederá a su retirada. “Como siempre, seguiremos las recomendaciones que marcan los técnicos”, sobre todo porque “hay un riesgo importante de caída en una zona muy transitada y la seguridad de las personas es prioritario”, ha afirmado con rotundidad.
 
“Seguimos trabajando en el cuidado y saneamiento del arbolado del municipio”, ha explicado la concejala,  atendiendo “siempre” a los criterios técnicos, recuperando o trasplantando aquellos ejemplares en los que sea posible su recuperación y retirando los que, cómo en este caso,  no solo presentan un estado de “deterioro irreversible”, sino que además suponen “una amenaza grave” para personas o bienes.