• Tras analizar los resultados y detectar algunas de las causas del problema, ambas administraciones destacan la disminución de manera notable del problema en la zona.

Astillero, 4 de marzo de 2022.  El Gobierno de Cantabria y el Ayuntamiento de El Astillero han finalizado las labores del estudio odorífero destinado a clarificar el origen de los problemas de malos olores detectados en el polígono industrial de Guarnizo durante los últimos años, mediante una unidad móvil de la Red de Vigilancia y Control de la Calidad del Aire, dependiente del Centro de Investigación del Medio Ambiente (CIMA), y una intensa campaña de inspecciones por parte de personal de la Dirección y del CIMA, y la colaboración de la Policía Local de El Astillero y el Seprona de la Guardia Civil, de acuerdo con un protocolo elaborado por los técnicos del Gobierno de Cantabria y consensuado entre todas las entidades implicadas.
Tras analizar los resultados del estudio encargado a una empresa especializada, ambas administraciones han podido detectar algunas de las causas de un problema permanente en el polígono y sus alrededores, especialmente, con el incremento de temperaturas.
De esta manera, el Gobierno de Cantabria, a través de la Consejería de Medio Ambiente, como entidad competente en la materia, ha tomado las medidas oportunas para mantener la mejora de la situación en la zona.
Unos resultados que concluyen con una disminución notable del problema de malos olores en la zona, tras un último año y medio en el que las tareas del “largo y completo” estudio, solicitado por el Ayuntamiento de El Astillero al Gobierno regional, han contado con la implicación de la Consejería que dirige Guillermo Blanco.
Durante todo este tiempo, tanto la Consejería como el Ayuntamiento han trabajado de manera conjunta y coordinada para solucionar “este grave problema”, actuando sobre el terreno y desplegando una intensa labor de vigilancia.
El consejero Blanco ha destacado “el buen hacer entre las dos administraciones” y fruto de este trabajo conjunto, ha dicho, “hemos conseguido que durante el tiempo del propio estudio se hayan reducido de manera muy considerable los malos olores”.
“Es el momento de que las empresas de la zona corrijan las actuaciones erróneas para que los vecinos del arco sur de la Bahía de Santander no vuelvan a sufrir las consecuencias de malos olores”, ha insistido Blanco.
Por su parte, el alcalde se ha mostrado orgulloso de los trabajos que se han realizado hasta la fecha y ha asegurado que “una vez detectado el foco del mal olor, se trasladará a las empresas las soluciones para que esto no vuelva a ocurrir en el futuro”.
Soberón ha aprovechado para agradecer a la Consejería la predisposición y la celeridad con la que han actuado para dar respuesta, de la mano del Ayuntamiento, a un problema que venían sufriendo los vecinos desde hace muchos años y se ha comprometido a seguir colaborando con la Consejería en proyectos medioambientales que contribuyan a mejorar la calidad de vida de los vecinos del municipio.