El Ayuntamiento de Astillero ha comenzado el año con tres importantes obras en marcha y en avanzado estado de ejecución. Se trata de proyectos que se iniciaron en el segundo semestre del año pasado y que se desarrollan cumpliendo los plazos previstos. Las tres forman parte del  Plan de Obras presentado al Gobierno Regional y que fue aprobado en su totalidad por este último. Su coste será financiado así en el marco de esta convocatoria de ayudas lo que implica que el 80% de su presupuesto será asumido por el Gobierno Regional mientras que del 20% restante se hará cargo la Corporación local. Una de las más adelantadas es la que supondrá la creación en el barrio Boo de un centro vecinal con una inversión prevista de casi 380.000 euros. Su diseño se basa en un proyecto redactado por el arquitecto municipal, Luis Pedraz y que se ha planteado con el fin de que sea lo más funcional posible y diáfano y responda así a las necesidades de los vecinos que lo utilizarán. El centro se ubica en una parcela que fue adquirida por el Consistorio, muy cerca del parque de Ocre.

La dotación vecinal contará con un salón de actos así como un espacio multiusos, entre otras dependencias. Permitiría acoger tanto exposiciones y muestras de todo tipo, como charlas, conferencias y los diferentes talleres y actividades que la asociación de vecinos así como otros colectivos del barrio llevan a cabo periódicamente y a lo largo de todo el año. Otro de los proyectos muy adelantados es el  del acondicionamiento de la Casa de Cultura  La Cantábrica para destinarla a espacio expositivo con el fin de recoger una parte tan importante de la historia local como es la vinculada con la construcción de barcos. Las obras, que fueron adjudicadas en casi 200.000 euros, abarcan tanto a la planta baja como la primera y segunda que componen este edificio.  Este inmueble se quedó sin uso tras el traslado del Centro de Educación de Adultos que en él tenía su sede al cercano IES Astillero, por lo que con estas obras se pretende adaptar sus diversas dependencias para el destino cultural decidido y, como es lógico, adecuarlo a las exigencias de seguridad y accesibilidad que debe tener todo edificio de uso público.  El tercer proyecto en marcha y que fue adjudicado el pasado verano en casi 650.000 euros, implica la urbanización de la calle Juan de Isla y su entorno así como la reforma del inmueble que fue adquirido en este mismo ámbito por el Consistorio para la ampliación de las dependencias municipales. Con este último proyecto se pretende la ampliación del espacio peatonal existente mediante la cobertura parcial de la zona destinada a aparcamiento y la renovación de toda la pavimentación y del mobiliario urbano de este ámbito con el fin de realzar un espacio que se localiza a escasos metros de la calle San José, en la que se hallan las oficinas generales del Ayuntamiento de Astillero así como diversas entidades financieras y establecimientos comerciales.