El auto judicial del Contencioso administrativo nº 2 de Santander ha rechazado la medida cautelar solicita para evitar el derribo, por parte de la inquilina de un negocio ubicado en los bajos del edificio, confirmando así la ejecutividad del acuerdo adoptado en Junta de Gobierno de Local el 18 de septiembre de 2014,  en la que se determinó la declaración de ruina de dicho inmueble.
Asimismo en esta resolución judicial, se atiende a los informes técnicos municipales y a los aportados por la comunidad de propietarios que defienden la declaración de ruina total.
Es más, una reciente revisión, por parte del arquitecto municipal sobre el estado de la edificación, se ratifica en el contenido de informes anteriores que citan textualmente “un escenario de riesgo claro, en el que la cubierta y dos de los forjados del piso del edificio amenazan con un derrumbe súbito hacia el interior del edificio lo que arrastraría en su caída al resto de forjados del piso”.
Por todo ello, “…frente a este interés particular económico, se erige el interés general y público que pretende preservar bienes y personas ante el riesgo de daños a estos bienes y valores fundamentales …”  indica el auto.
Lo qyue aconseja al equipo de gobierno continuar con las medidas adoptadas como son el desalojo del inmueble,  y las medidas de seguridad oportunas  salvo mejor decisión de la autoridad judicial y sin perjuicio de lo que resulte en el proceso.
Por ello ya se ha procedido al vallado y delimitación de la zona por parte de la Policía Local.