Subir arriba de la pagina

Los alumnos del Aula de Música Moderna de El Almacén de las Artes del Ayuntamiento de Astillero ofrecen un concierto de fin de curso el miércoles

Junio 22 2009

El Ayuntamiento de Astillero ha organizado el miércoles,  24 de junio a las 18,00 horas en El Almacén de las Artes, un concierto de fin de curso que será protagonizado por alumnos de la Escuela de Música Moderna del centro en el que mostrarán los conocimientos adquiridos a lo largo del año.
 La entrada será gratuita.
Un día después, los alumnos serán los protagonistas de un nuevo concierto, esta vez junto a sus profesores.
En esta ocasión, el concierto será a las 19,00 horas.
El primero de los conciertos estará protagonizado por los alumnos más jóvenes de El Almacén de las Artes, en concreto, serán los niños de 4 a 6 años matriculados en el Método Yamaha.
El pianista Eder Paiva ha sido el profesor encargado de dirigir las clases a lo largo del año, así como de los ensayos previos a lo que supone el primer concierto en público para muchos de los niños matriculados en la Escuela de Música Moderna de El Almacén de las Artes del Ayuntamiento de Astillero.
Esta escuela es pionera en Cantabria en el Método Yamaha para niños de 4 a 6 años, una metodología que destaca por ser un excelente y divertido primer acercamiento de los niños al mundo de la música.
En cuanto al concierto del día 25, será protagonizado por alumnos de la Escuela de Música y sus profesores.
Tras 10 meses de clases y tras algunos fructíferos y divertidos ensayos, los alumnos de música mostrarán parte de lo aprendido en el último año.
Abordarán temas desarrollados durante el curso, algunos firmados por ellos mismos,  así como varios de pop, jazz y rock.
Para la mayoría de ellos será así su primera experiencia en directo.
También se recordará al recientemente fallecido Antonio Vega, cantante de los míticos Nacha Pop.
Con esta iniciativa del Ayuntamiento, se pretende que los jóvenes alumnos adquieran una experiencia que les ayude a hacer tablas sobre un escenario, perder el miedo que puedan tener a tocar delante de un público y en definitiva, que pasen un buen rato y se lo hagan pasar a quienes les escuchen.
Lo que se pretende es que los alumnos prueben,  experimenten, descubran la música y las diferentes creaciones artísticas en un centro que es a la vez una escuela de artistas y un espacio para la formación de oyentes y espectadores que, practiquen o no las enseñanzas recibidas, van a ver, escuchar y sentir la cultura como algo propio.