A lo largo de la mañana de ayer un grupo de estudiantes de Biología del IES Astillerose han dedicado a acondicionar una charca en el área de Morero para que pueda servir de hábitat a las especies anfibias que existen en la zona y que son muy beneficiosas para controlar la proliferación de insectos. La acción de restauración ambiental se encuadra en la Semana Europea de la Custodia del Territorio a través de la cual se pretende implicar a los propietarios y usuarios del territorio en la conservación así como el uso de los valores y los recursos naturales, culturales y paisajísticos. La asociación y el Ayuntamiento de Astillero mantienen desde el año 1999 un acuerdo de custodia del territorio para la restauración y conservación de la red de espacios públicos del municipio, colaboración que sigue desde entonces y que ha permitido promover la restauración ambiental de espacios tan emblemáticos como las Marismas Blancas o Morero. Asimismo, SEO/BirdLife, cuya sede en Cantabria se encuentra en las Marismas Negras, es una de las entidades de custodia más veteranas de España y posee una amplia Red de Reservas Ornitológicas en las que trabaja en la conservación y mejora de hábitats de diversas especies, ya sea coparticipando en su gestión mediante convenios con ayuntamientos, propiedades privadas u otras organizaciones, o gestionando directamente terrenos en propiedad. Los proyectos de recuperación ambiental que se llevan a cabo en el municipio suelen incluir la creación de entornos como el que protagonizará la acción del martes próximo. Así, uno de estos ejemplos se puede ver en el arroyo de la Canaluca, en la zona que se separa el Polígono Industrial de Guarnizo y el Parque Empresarial de Morero, en cuyo plan de restauración ambiental y paisajística se incluyó el acondicionamiento de zonas inundadas aprovechando el agua de lluvia con el fin de facilitar la colonización de la vegetación palustre y favorecer las poblaciones de anfibios y aves, especialmente a dos especies de un gran interés de conservación a escala regional como el chorlitejo chico y la ranita de San Antón.