Esta tarea forma parte de los compromisos asumidos por  la empresa encargada del mantenimiento y conservación de los parques y jardines de la localidad.
Esta labor, que comenzó el pasado mes de noviembre, se lleva a cabo una vez al año por esta fecha y se extiende a lo largo de dos meses.
Tras ella se comenzará una nueva campaña destinada a la reposición de las especies vegetales con el fin de sustituir las que se han deteriorado o malogrado.
Desde el Ayuntamiento se considera además que este tipo de actuaciones son necesarias no sólo desde el punto de vista ornamental y decorativo sino por la seguridad de las vías públicas, dado el porte y la altura que alcanzan algunos árboles.
El servicio de conservación de parques y zonas verdes abarca a más de 70 áreas de todo el término municipal.
La zona más amplia se corresponde con el parque de La Cantábrica, que tras las ampliaciones de los últimos años, sobretodo tras la recuperación de la zona de Orconera en la que se hallaban los depósitos de mineral, suma alrededor de 67.000 metros cuadrados de superficie a mantener, seguida del parque de La Planchada y el Redondel, con alrededor de 17.500 metros cuadrados y el paseo junto a la ría en la  urbanización  Los Puertos con casi 5.000 metros cuadrados de zona verde, entre otras  áreas.
 El mantenimiento de las zonas ajardinadas del municipio incluye su limpieza así como el riego, la reposición de las especies, podas, transplantes y tratamientos a realizar, además del abonado de las zonas, la reposición de la plantas permanentes o de temporada, arbustos, árboles y zonas de césped que hubieran pedido o mermado considerablemente sus características ornamentales.